En la 7ª avenida norte, casa número 92ª de La Antigua Guatemala se encuentra la tienda de Don José Armas, reconocido por los antigüeños como “Chepe Armas”. Jackeline, la esposa, cuenta que la abuela María Buendía de Armas es a quien le atribuyen el invento del Chinchivir, una bebida refrescante a base de limón.
Jackeline de Armas, asegura que la familia de su esposo comenzó a vender el Chinchivir como un refresco durante 1936. Años más tarde comenta que la receta pasó a ser propiedad de los padres de José, y ahora son ellos quienes producen la bebida. En 2009 patentaron la marca.
Los antigüeños recuerdan que el Chinchivir de la familia de “Chepe Armas” se vendía servido en botellas recicladas de gaseosas. Luego la medida de venta pasó a ser en vasos de plástico, hasta hoy que han evolucionado y se promociona en botellas de plástico selladas.
El misterio del Chinchivir
En un blog llamado Harry Approved! el autor fue en busca de Chinchivir. Relató que la bebida podría tratarse de una especie de Gatorade Maya y que su sabor podría lograrse quizás de alguna mezcla fermentada a base de distintos tipos de limones.
El blog menciona la posibilidad de que el Chinchivir fue una poderosa pócima que involucra a los más ancestrales rituales de los Dioses Mayas. Sin embargo, Jackeline dice que esto no podría asegurarlo porque tienen poca información del origen de la bebida.
La receta como tal no la comparte, la cuidan como un secreto de familia. Lo que sí asegura Jackeline es que el refresco de tonalidad amarillenta no es fermentado y tampoco lleva menta o jacarandas como algunos opinan. Tampoco es una bebida que únicamente se encuentra durante la Cuaresma.
Es más bien un refresco a base de limón con diferentes especias que le dan ese inigualable sabor.
La bebida es preparada de la manera más higiénica con agua de ozono, se explica. La familia Armas ha empezado a comercializar esta deliciosa bebida.